Libro típico de un escritor perteneciente a un grupo político e ideológico que interpreta el proceso de la cultura argentina según la “crítica marxista” (p. 7). Arias utiliza dicha doctrina en la interpretación de “lo nacional y lo europeo en la literatura argentina y, por implicación, en la formación del pensamiento nacional latinoamericano” (p. 9). Sostiene que Sarmiento, Mitre, lo mismo que Victoria Ocampo, Martínez Estrada, Mallea y Borges son productos de una cultura imperialista, semi-colonial y anti-argentina. Gran parte del libro condena los juicios de Martínez Estrada y Borges sobre José Hernández y su Martín Fierro. Su “teoría de lo nacional” como “fundamentación de una cultura con rasgos autóctonos” (p. 60) es la siguiente: “La realización de la unidad política latinoamericana será el corolario natural de nuestra época y el nuevo punto de partida para un desarrollo triunfal de la cultura americana, nutrida en su suelo y, por lo mismo, universal” (p. 61). Y eso se logrará “bajo la conducción política de la clase obrera hispanoamericana . . .” (p. 61). He aquí la dialéctica, entre ingenua y panfletaria, en que se pretende explicar la “crisis y resurrección de la literatura argentina.” Si el enfoque del tema es legítimo, y con no pocas intuiciones certeras, su exposición no pasa de un débil ensayismo impresionista.