Esta obra fue la primera de una soberbia trilogía dedicada a los marranos, aquellos judíos o descendientes de judíos convertidos al cristianismo, quienes aprovechando la unión de las dos coronas de Castilla y Portugal entre 1580 y 1640, optaron por pasarse al continente americano en busca de oportunidades y de mayor libertad para seguir practicando el judaísmo con menores riesgos que en la Península. Se establecieron sobre todo en los dos virreinatos españoles de la Nueva España y del Perú y en el Brasil portugués, estrechamente comunicados en el marco del Imperio español con los reinos peninsulares, los países europeos a los que las diásporas de 1492, 1496 y siguientes habían llevado a familias enteras de marranos, y con países del Magreb y Turquía, sin olvidar las Indias portuguesas y las islas Filipinas. Nathan Wachtel presenta algunas historias de vida a partir de la documentación inquisitorial proveniente de...

You do not currently have access to this content.