El problema de la articulación mercantil entre una extensa porción del Virreinato del Perú y el mundo atlántico a través del Río de la Plata es un asunto sobre el que hace bastante tiempo existe una sólida matriz interpretativa, que tiene su formulación más sistemática en el trabajo ya clásico de Zacarías Moutoukias, Contrabando y control colonial, aparecido hace algo más de tres décadas. En este contexto historiográfico, en el que parecen abundar los consensos esenciales, se inserta este reciente libro de David Freeman, que aporta una mirada compleja sobre una de las cuestiones no tan conocidas del fenómeno: las prácticas y los vínculos que les permitieron a los mercaderes holandeses intervenir de diversas formas en el comercio rioplatense entre los años 1648 y 1678. Este recorte cronológico se abre con la Paz de Westfalia, que creó unas condiciones favorables para la presencia holandesa en varios puertos de la...

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